La Casa Blanca anunció este martes un plan dotado de 800 millones de dólares destinados a descontaminar, demoler o reciclar antiguas fábricas del gigante del automóvil General Motors (GM), que tras su quiebra se encuentra bajo tutela estatal.
Este plan-marco elaborado por la Casa Blanca y la Agencia de Protección Ambiental (EPA) "ayudará a acelerar la reconversión de más de 90 antiguas usinas de GM (y a) crear empleos", según la presidencia estadounidense.
Más de 800 millones de dólares ya asignados en el marco del plan de rescate de GM a principios de 2009 serán puestos en un "Fondo de acción para el Medio Ambiente".
De esa suma, 536 millones serán dedicados "a descontaminar terrenos" y alrededor de 300 millones a ayudar a los estados y a los organismos locales "a responder a las dificultades que suponen esas propiedades, entre ellas impuestos, costos de demolición y de seguridad".
Los 90 sitios industriales concernidos se hallan en 14 estados, según la misma fuente. (AFP)